sábado, octubre 08, 2005

Buscando cena

Llegó el momento de cenar.
Gracias a mi nuevo compromiso con hacer 3 comidas al día y dado que el repertorio de alimentos en mi casa es muy escaso y mi repertorio de recetas todavía menor, decido buscar algo de cena por ahí.
Cerca de mi casa no hay muchos sitios donde puedas comprar comida (como carnicerías o pescaderías) ni restaurantes. Lo que hay son sitios que vas allí y te hacen la comida en el momento. Algunos tienen espacio para sentarte (que nadie utiliza), otros no.
Me doy un rulo por mi barrio en busca de un sitio de esos. Veo tiendas abiertas, pero la única que entiendo de que trata parece que es una especie de tienda de medicina alternativa. Asi que voy hacia la universidad.
La universidad está rodeada de tiendas de comida (tendrán un nombre?) siempre llenas de alumnos (y no hay quien pase).
Yendo hacia allí estoy a punto de ser atropellado por una moto con un padre y tres hijos (casi cometo un familicidio) y prácticamente instantáneamente estoy a punto de ser atropellado por una moto en sentido contrario (que iba curiosamente dirección contraria por una calle bastante amplia, algo que no es del todo inhabitual). Claro, estas dos motos casi se la dan entre ellas. O eso es lo que diria un español, porque un taiwanés diría que bien, que no pasa nada, que todo normal, espacio de sobra.

Llego a la universidad y todas las tiendas de comida están cerradas. En cambio, una óptica y 2 tiendas de fotocopias están abiertas. Un sábado por la noche! Tiendas para comer cerradas y tiendas de fotocopias abiertas!
Esto me hace plantearme qué tipo de actividades lúdico/recreativas se hacen en este país. ¿Irte a cambiar los cristales de las gafas? ¿Juerga toda la noche fotocopiando libros?
Me empiezo a adentrar en la ciudad en busca de algo de comer cuando empiezan a aparecer tiendas de comida. En una aparece un samurai relamiendose, tiene buena pinta, hay gente comprando, voy a ir. Cuando leo el cartel y solo entiendo una letra : Té
La siguiente tienda que veo también tiene buena pinta pero es una tienda de helados, aquí es octubre pero estamos a 30 grados.

Empiezo a encontrar tiendas de comida, mogollón y la verdad no tengo muy claro lo que son cada una, no veo a nadie comprarndo del que pueda copiar. Ni siquiera sé si podré llevarme la comida a casa o tendré que comerla allí. Empieza a entrarme una vergüenza que te pasas y me doy la vuelta (excusa, volver a mirar las tiendas). Estoy a punto de irme a casa cuando pienso: "bah, soy español, que no se diga :P", y voy a una tienda donde en el cartel tiene 3 veces la letra de oveja.

1 comentario:

Unknown dijo...

coñe, lo explico mas arriba!